5 ideas para organizar vestidores pequeños

¡Para muchos, tener un vestidor en casa es un sueño! Toda la ropa junta y organizada, espacio para vestirse cómodamente, espejos para ver el resultado final… y todo eso es una estancia amplia, espaciosa y bien iluminada.

Y ese es el error, creer que los vestidores son algo necesario solo cuando se tienen espacio extra. Por supuesto, no podemos darle más metros cuadrados a tu casa, ni crear una habitación donde no la hay, pero si podemos distribuir el espacio para crear una zona de vestidor en el dormitorio o incluso en otras habitaciones de la casa.

¿Quieres ver cómo conseguir vestidores pequeños que quepan en casa?

El ideal lo tenemos claro: una estancia grande llena de armarios donde todo cabe y todo está bien organizado. Y ahora veamos cómo adaptar ese ideal a los espacios pequeños, es decir, a la cruda realidad.

Lo primero es pensar dónde vamos a montar ese vestidor. Lo más probable es que no contemos con una habitación exclusiva para ello, y en ese caso lo mejor es habilitar una zona del dormitorio, como en la foto que vemos en portada. Aunque puede que sí tengamos una habitación vestidor, pero sea tan pequeña que no sepamos que hacer con ella. ¡Aquí unos truquitos básicos!

1. Separa ambientes

No siempre es posible, pero una buena idea si vas a montar el vestidor en el dormitorio, es separar ambientes. Hay muchas formas de hacerlo, una opción es poner una estantería abierta (tipo expedit, que además es muy habitual para guardar ropa), en medio; de manera que a un lado quede la cama y la mesilla, y del otro el armario, las propias baldas de la estantería y el resto de los accesorios del vestidor. Si una estantería es muy voluminosa, siempre podemos conformarnos con un biombo, y poner un burro delante para colgar ropa.

Aunque sin duda la mejor propuesta que he visto nunca es la del video de abajo de ikea (La multinacional sueca es una experta en vestidores pequeños, y en aprovechar rincones en general). Consiste en poner la cama en el medio de la habitación, y delante, a modo de cabecero, la parte trasera del armario. Así, podemos crear un pasillo ficticio que usar a modo de vestidor. ¡Pero se entiende mucho mejor viendo el vídeo!

2. Usa también el espacio vertical

No te creas que solo podemos aprovechar el espacio a lo ancho, también podemos hacerlo a lo alto. Esto es especialmente práctico en pisos antiguos de techos altos, ¡y lo mejor es que ocupamos un espacio que nunca molesta! ¿Cómo hacerlo? Hay muchas opciones, podemos poner baldas en la parte más alta de las paredes, donde guardemos cajas con la ropa o los accesorios que menos usamos. Pensemos por ejemplo en el espacio sobre la puerta, que suele estar desaprovechado, ¿por qué no poner un armarito horizontal que llegue hasta el techo?

En la foto de debajo podemos ver que los vestidores pequeños no son exclusivos del dormitorio, también se pueden montar en un baño grande, aunque puede haber problemas con la humedad. En este caso vemos como se aprovecha la pared para crear hornacinas donde guardar los complementos. La escalera es fundamental para llegar al «segundo piso».

3. Estantes abiertos

Es cierto que en las estanterías y armarios abiertos se puede llenar todo de polvo, pero resultan mucho más ligeros (cuando no directamente estrechos) que los armarios convencionales. En otros casos, cuando el espacio es muy reducido, puede ser mejor apostar por burros y percheros, que dejan la ropa a la vista, o por estructuras de almacenaje abierto como la Stolmen de Ikea, que permite todo tipo de combinaciones y se adapta muy bien a la función de vestidor.

4. Aprovecha rincones inesperados

Agudiza el ingenio para sacar espacio para el vestidor. Puede ser una zona inutilizada bajo la escalera, puede ser la parte más baja del ático, donde no te caben otros muebles, puedes tirar abajo las puertas de un armario empotrado grande para organizar de otra manera el interior, o incluso puedes colocarlo detrás de la salita si vives en un piso de estilo creativo y bohemio. Sitio hay, solo tienes que encontrarlo.

5. Organiza el contenido

Los vestidores se idearon para tener toda la ropa en orden, así que es un espacio donde la organización es fundamental. Muchísimo más si los vestidores son pequeños o abiertos, porque si no el desorden inundará toda la casa, y poco habrás ganado.

Tener las prendas clasificadas por tipo (y saber donde va cada una), la ropa que usamos habitualmente siempre a mano (y puesta de manera que al coger una prenda no arrastremos todas las demás), contar espacio diferenciado para los zapatos y para los bolsos, tener colgadores para pañuelos y joyas… todo eso es importante. Pueden ayudarte accesorios para el interior del armario como armarios colgantes, cajas, perchas especializadas o estructuras con cestos.

Como ves, para crear y organizar vestidores pequeños solo hacen falta dos cosas: muebles de almacenaje y mucha imaginación.