Dormitorios de estilo nórdico: inspiración escandinava

¡Me encantan los dormitorios de estilo nórdico! Parece que la inspiración escandinava ha venido para quedarse, y cada vez es más habitual encontrar hogares donde el blanco es el color predominante, los muebles son siempre de madera, y el color solo se encuentra en pequeños toques pop. ¡Y es fantástico!

Probablemente IKEA haya ayudado bastante a esparcir el gusto por la decoración nórdica, pero de lo que no cabe duda es de que resulta moderna y muy cálida.

¿Quieres ver algunos dormitorios de estilo nórdico llenos de encanto? (¡Para después copiarlos, claro!).

Hay muchas características particulares que dotan al estilo nórdico de ese carácter tan entrañable, tan de refugio en medio de la ciudad. El primero es el uso de materiales naturales, especialmente la madera, pero no solo. Además, en la mayoría de los casos, se trata de maderas muy claritas.

Otro es la sencillez. En los dormitorios de estilo nórdico nunca hay más muebles de los necesarios (a veces incluso parece que hay menos): si tu casa es pequeña y eso te obliga a llenar de libros, ropa y objetos varios el cuarto, tu habitación nunca será como la que vemos arriba, pero aún así, apostar por el menos es más es fundamental.

En la misma línea, el color básico es el blanco, que se sitúa en paredes, muebles, textiles y a veces hasta suelos. Así se dota de luminosidad a la estancia. Eso sí, para que no resulte frío, hay que dar pequeños toques personales en la pequeña decoración.

Utilizar la repisa de la ventana es súper habitual en el norte de Europa, aunque dependiendo de cómo abra puede no ser muy práctico. Pero sin duda es una buena idea para conseguir almacenaje extra ;-).

La naturalidad del dormitorio de estilo nórdico a veces roza lo rústico, como en este cabecero realizado con palés. Para compensar, mesilla y cómoda de factura muy moderna.

También los burros son muy habituales, aunque no hay que pasarse, porque si no el cuarto acaba pareciendo una tienda en rebajas. Otra constante que veremos en todas las fotos es la importancia de la decoración de pared, con cuadros y láminas variados.

Se suele aprovechar los textiles y la pequeña decoración para sacar partido del color.

Y es que una habitación escandinava puede ser también alegre y colorida. Eso sí, la sencillez no se abandona.

Los armarios emportrados y las librerías integradas en la pared son una buena manera de conseguir almacenaje sin sacrificar la pureza del espacio. Los muebles con personalidad (como este escritorio) nunca vienen mal.

¿Te gusta el estilo nórdico para el dormitorio?

Fotos vía: Bo Laget y Decordots